MALÍ / FRANCIA | RSF insta a los presidentes francés y maliense a encontrar a los asesinos de Ghislaine Dupont y Claude Verlon
Reporteros Sin Fronteras (RSF) y la Asociación de Amigos de Ghislaine Dupont piden a las autoridades francesas y malienses que hagan todo lo posible para que avance la investigación por el asesinato de Ghislaine Dupont y Claude Verlon, periodistas de ‘Radio France International’ (RFI), muertos en Malí el 2 de noviembre de 2013. El presidente francés, François Hollande, recibe este 26 de julio a su homólogo maliense, Ibrahim Boubacar Keita.
El 2 de noviembre de 2013, la periodista de RFI Ghislaine Dupont y el técnico Claude Verlon fueron secuestrados y asesinados en el desierto a pocos kilómetros de Kidal, en el norte de Malí. Los asesinatos fueron reivindicados posteriormente por Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).
Aparte de las pesquisas sobre el terreno que llevó a cabo la gendarmería francesa inmediatamente después de la tragedia, ni los jueces malienses y ni los francesas han enviado a ningún equipo para investigar en profundidad. Sin embargo, la fuerza francesa Barkane realiza desde enero de 2013 las operaciones antiyihadistas en la región, en colaboración con el ejército de Malí. Las razones de seguridad, por tanto, no pueden justificar la falta de investigación sobre el terreno.
«Dos años y medio después del doble asesinato, Reporteros Sin Fronteras y la Asociación de Amigos de Ghislaine Dupont piden a los presidentes Holland y Keita que tomen medidas concretas para garantizar que los autores sean identificados, detenidos y procesados», reclama Clea Kahn-Sriber, responsable para África de Reporteros Sin Fronteras.
«Hay que poner fin a esta situación de impunidad, no sólo por los familiares de las víctimas, sino también para enviar el mensaje, claro y amplio, de que la violencia contra los periodistas no queda impune. La situación de seguridad en el norte de Malí no puede excusar ningún retraso en la investigación y cabe legítimamente cuestionar la voluntad real de las autoridades malienses y francesas de llevarla a cabo algún día».
Los miembros de la Asociación de Amigos de Ghislaine Dupont no ocultan su indignación y frustración. «Desde 2013, los presidentes francés y maliense prometen que se hará lo posible por identificar, detener y juzgar a los asesinos. Política y mediáticamente, han hecho los gestos necesarios», señala Christophe Boisbouvier periodista de RFI y miembro de la organización. «Pero sólo vemos la brecha entre las palabras y los hechos. Tenemos la sensación de que en realidad no es una prioridad ni para París ni para Bamako, y que prefieren pasar página».
En mayo de 2015, el juez antiterrorista francés Marc Trévidic, entonces a cargo del caso, reclamó al Ministerio de Defensa francés la desclasificación de todos los documentos de «defensa confidencial» relativos a la tragedia. En julio de 2015, tras una emotiva carta abierta de la madre de Ghislaine Dupont a François Hollande, éste recibió en el Elíseo a las familias de ambas víctimas y prometió que todos los documentos serían desclasificados, además de que los culpables serían detenidos y procesados.
Ocho meses después, en marzo de 2016, sólo eran accesibles unos pocos archivos. Según fuentes fidedignas, se trata de una selección disparatada, censurada en parte, que no hace avanzar la investigación. En septiembre de 2015 se nombró a un nuevo juez de instrucción, Jean-Marc Herbaut, que todavía no ha recibido a las familias de las víctimas.
Malí y Francia ocupan, respectivamente, los puestos el 122 y 45, de 180 países, en la Clasificación Mundial 2016 de la Libertad de Prensa que publica Reporteros Sin Fronteras. Más, en el Informe Anual de la organización.