AFGANISTÁN | Besmellah Adel Imaq, primer periodista asesinado de 2021: RSF pide el fin de la espiral de violencia
Después del asesinato del periodista Besmellah Adel Imaq, el primero de 2021 y otro más en la lista de uno de los países más mortíferos del mundo para los medios de comunicación, Reporteros Sin Fronteras (RSF) insta a las autoridades de Afganistán a hacer todo lo posible por proteger al personal de los medios. La organización afirma que está explorando todas las vías posibles para ayudar a acabar con la espiral de violencia en el país.
Besmellah Adel Imaq, director de la emisora de radio Voice of Ghor, fue asesinado a tiros cuando regresaba a su casa en Firoz Koh, la capital de la provincia central de Ghor, la tarde del 1 de enero. Es el primer periodista afgano asesinado en 2021 y el quinto trabajador de medios de comunicación asesinado en el país en los últimos dos meses.
Imaq había sido objetivo de dos intentos previos de asesinato, el último en noviembre, y había denunciado las amenazas recibidas a las autoridades. Después de que no tomaran ninguna medida para protegerlo, Imaq lo denunció a las asociaciones de periodistas.
Las cuatro víctimas de los dos últimos meses han sido Mohammad Aliyas Dayee, de Radio Free Europe/Radio Liberty’s en lengua pastún, asesinado en Lashkargah el 12 de noviembre; Malala Maiwand, presentadora de televisión y representante del Centro para la Protección de Mujeres Afganas Periodistas (CPAWJ, por sus siglas en inglés), y su chofer Taher Khan, asesinados en Jalalabad el 10 de diciembre, y Rahmatollah Nekzad, reportero de medios internacionales, asesinado en Ghazni el 21 de diciembre.
La Dirección Nacional de Seguridad (NDS, por sus siglas en inglés) y la policía han dicho que han detenido a ocho individuos vinculados a los talibanes como sospechosos de estos cuatro asesinatos. Horas después del asesinato de Imaq, RSF contactó con el portavoz talibán Zabiholah Mojahed, quien aseguró que los talibanes “no tienen interés en matar a periodistas”.
“La impunidad y la opacidad que rodean a los asesinatos de periodistas son una seria lacra en Afganistán, pero una bendición para todos aquellos que buscan destruir la libertad de prensa en este país”, ha declarado Reza Moini, jefe del departamento para Irán y Afganistán de RSF. “Es vital que las autoridades afganas garanticen y refuercen la seguridad del personal de los medios de comunicación. Al mismo tiempo, RSF está explorando todas las vías internacionales posibles para poner fin a esta espiral de violencia”.
En un comunicado del 31 de diciembre, la NDS afirmó que había impedido tres ataques contra periodistas en las provincias de Khost, Kabul y Ghazni. Las amenazas y la violencia contra periodistas y medios de comunicación ha aumentado en los últimos meses en Afganistán, a pesar de que se esperaba un respiro debido a las conversaciones de paz entre los talibanes y el gobierno afgano.
Afganistán ocupa el puesto 122 de los 180 países que forman la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2020 de Reporteros Sin Fronteras.