Desde el final de la guerra civil, en 1996, han surgido en el país numerosas «juntas» y «comités» que se dedican a la “limpieza social” (acabar con los delincuentes). El 27 de octubre de 2011, la periodista Lucía Escobar acusaba en El Periódico a una de ellas de la desaparición de un joven. En concreto se trataba de la Comisión de seguridad de Panajachel, en Sololá, a la que la Escobar acusa también de haberla amenazado tras la publicación de su columna.
Reporteros Sin Fronteras pide a las autoridades que garanticen la seguridad de la periodista, que ha abandonado su domicilio y oculta su paradero por temor a las amenazas recibidas. La organización exige igualmente una investigación seria y eficaz para identificar a los autores de estas intimidaciones.
En su columna, Lucía Escobar acusaba a varios miembros influyentes de la Comisión, así como al alcalde de Panajachel, Gerardo Higuero, de “representar y defender a los encapuchados» de la localidad, un grupo de individuos que patrulla de noche las calles, con las caras tapadas, provistos de armas de todo tipo (bates de beisbol, pistolas de electroshock), para supuestamente velar por la seguridad de la ciudad. “Hasta hoy existen más de 30 denuncias contra los encapuchados por distintos delitos, como abuso de autoridad, tortura y secuestro. Eso no queda ahí, ahora también hablamos de asesinato, limpieza social y ejecución extrajudicial”, podía leerse en la columna de Escobar.
El 27 de octubre la Comisión respondió en directo a dichas acusaciones, en la televisión local Canal 10, propiedad de Gerardo Higuero. Los miembros de la Comisión acusaron a Lucía Escobar de tráfico y consumo de drogas. El Instituto de Prensa y Sociedad (IPYS) informó que la periodista también había recibido mensajes amenazantes donde se le advertía de la posibilidad de acabar “en el fondo del lago” de Atitlán, haciendo alusión a la última frase de su columna: “Si la próxima en descansar en el fondo del lago más lindo del mundo con piedras amarradas al cuerpo soy yo, ya sabrán a quién culpar”.
Según el informe publicado el 27 de octubre pasado por la Secretaría de la Declaración de Génova, los grupos armados ligados al crimen organizado convierten a América Central en la región más peligrosa del mundo. Peligro extensible al ejercicio de la profesión periodística. El 29 de octubre, en Honduras, Edy Andino, periodista de la cadena televisiva Canal 6, fue herido de gravedad tras ser disparado por cuatro individuos a bordo de un autobús turístico cuando se dirigía en coche a su domicilio en San Pedro Sula. Los disparos no pararon hasta que el periodista dijo que trabajaba para el Canal 6, lo que indica que la agresión no estaba relacionada con su actividad profesional. Andino está fuera de peligro.
