AUSTRALIA | Preocupación por las intenciones del Gobierno de legislar sobre el encriptado de mensajes
Reporteros Sin Fronteras pide al gobierno australiano que abandone los planes para forzar a las empresas de tecnología a colaborar con ley en el desencriptado de mensajes. Una medida de esas características supondría una gravísima amenaza para la privacidad y especialmente la confidencialidad de las fuentes periodísticas.
El primer ministro, Malcolm Turnbull, ha confirmado hace una semana que su gobierno pretende introducir una legislación que obligaría a las empress de tecnología a permitir que las autoridades lean mensajes encintados de usuarios de aplicaciones como WhatsApp o iMessage.
El gobierno australiano alega que necesita esta medida para combatir el crimen y el terrorismo, pero estos mensajes encriptados permiten a los periodistas proteger a sus fuentes. RSF urge por ello a las autoridades australianas a cambiar el curso de esta iniciativa y cualquier legislación que pueda terminar en el acceso a datos individuales.
“Una legislación así violaría el derecho del público a la privacidad y supondría un grave riesgo para la confidencialidad de las fuentes periodísticas y de los informantes”, alerta Elodie Vialle, responsable de la oficina de periodismo y tecnología de Reporteros Sin Fronteras. “La libertad de información no debe sacrificarse en la lucha contra el terrorismo. Las autoridades no deben estar autorizadas a espiar a los periodistas y sus fuentes”, añade.
RSF apoya plenamente la crítica a esta propuesta de ley expresada por varias organizaciones australianas que representan a periodistas y medios de comunicaicón.
La iniciativa australiana no es única, desafortunadamente. En junio, los gobiernos británicos y francés acordaron un plan conjunto de acción que priorizaría la lucha contra el terrorismo ante el derecho a la privacidad en Internet.
Acordaron “trabajar juntos para garantizar que los datos y contenidos de las comunicaciones puden estar rápidamente accesibles mediante medidas legislativas más allá de las fronteras, donde quiera que estén almacenados”. De nuevo Reporteros Sin Fronteras manifestó su preocupación por el potencial abuso y el impacto que todo ello pudiera conllevar para la protección de los periodistas y sus fuentes.
RSF ha apoyado la iniciativa de más de 80 organizaciones e individuos en Australia, Canadá, Nueva Zelanda, Reino Unido y Estados Unidos, que elaborara una carta a sus respectivos gobiernos, el 30 de junio, urgiéndoles a respetar el uso de los mensajes encriptados.
Australia ocupa el puesto 19 de los 180 países que conforman la actual Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa.
Consulta más información sobre Australia en el Informe Anual elaborado por RSF-España.