BULGARIA | RSF habla con Genka Shikerova sobre la libertad de los medios en su país
El coche de Genka Shikerova, una periodista conocida por sus incisivas entrevistas a políticos búlgaros, fue incendiado frente a su casa de Sofía en la noche del 16 de septiembre. Este incendio reaviva la preocupación por la libertad de información y la seguridad de los periodistas en Bulgaria. Reporteros Sin Fronteras, que condena esta agresión, publica una entrevista con la periodista búlgara. Desislava Kyurkchyeva entrevistó a Shikerova para Reporteros Sin Fronteras el 23 de septiembre.
¿Hay novedades sobre la investigación?
La policía trabaja en el caso, pero es imposible completar la investigación en una semana. Ya me han interrogado una vez y es un procedimiento bastante habitual. Están investigando, pero no tengo ni idea de hasta dónde han llegado.
Para este caso ¿le ha ofrecido protección la policía ?¿Ha solicitado usted misma la protección?
El procedimiento en este caso es diferente y esto entra en los protocolos. De una forma o de otra, no quiero nada. He recibido el apoyo total de la cadena de televisión: el director del departamento de noticias me ofreció contratar a un guardia, pero yo me negué porque no pienso cambiar mi estilo de vida a causa de lo sucedido.
¿Ha recibido llamadas, mensajes o algún tipo de amenazas, antes o después del caso? ¿Puede relacionarlos de alguna manera con su trabajo, por lo que hace ahora o lo que hizo en el pasado?
No, no antes de que eso sucediera. Ni después he recibido amenaza o mensajes relacionados con este incidente, ni tengo ningún problema con el que pueda vincularlas. Traté de recordar alguna, ya que la policía me hizo las mismas preguntas, pero no puedo encontrar ninguna relación.
¿Confirma los informes de varios medios de comunicación de que usted relaciona lo sucedido con su trabajo periodístico? Nunca he confirmado este particular. No encuentro ninguna conexión entre la escalada de la tensión política y el incendio provocado. El único medio de comunicación búlgaro con el que que he hablado es bTV. Los contenidos están en su web y todo lo demás es una descabellada interpretación de mis palabras. Ni puedo y no quiero sacar conclusiones.
¿Teme por su integridad o la de sus familiares?
Lo que realmente quiero creer es que se trata de vandalismo. Intento no pensar en ello ni analizarlo. Para que el miedo no penetre mis pensamientos. Esto ocurrió y espero que la investigación dé resultados, pero si eso no sucede, no pienso convertirme en víctima de un incendio provocado.
Conocerá la teoría que vincula la quema de su coche con sus entrevistas a los parlamentarios Lyutvi Mestan y Sergei Stanishev. Algunos las consideraron incisivas.
En este caso, no puedo tener una opinión porque no tengo pruebas y sería absurdo echarle la culpa a nadie. Hice las preguntas periodísticas adecuadas en esa situación, las que cualquier colega habría hecho y de las que él o ella habría querido obtener respuesta. Por eso, desde el punto de vista periodístico, creo que hice mi trabajo.
¿Cómo valora su trabajo en el programa matutino «Esta mañana»? ¿Ha sido presionada? Está claro que el país vive un momento político delicado. Personalmente, ¿ha notado alguna diferencia en su trabajo desde que trabaja en el programa de la mañana?
Yo, personalmente, no, porque siempre he tenido libertad para hacer preguntas, como periodista y como presentadora. Muchos colegas se niegan a creerlo, pero hasta ahora nunca he sufrido ningún tipo de presión. Y lo digo bien alto.
Debido al número limitado de programas políticos, el programa matinal de bTV juega un papel excepcional en la formación de la opinión pública del país. A menudo es objeto de crítica. ¿Cómo afecta esto a su trabajo?
Por eso es interesante, porque ofrece una amplia plataforma para comentarios, análisis y debates. Cualquier persona tiene derecho a la opinión personal y los nuevos medios de comunicación ofrecen la oportunidad de que esa opinión llegue más gente. Por esta razón, hay muchos comentarios y no veo nada malo en ello.
En la entrevista con el líder del Partido Socialista y del Partido Socialista Europeo, Sergei Stanishev, éste le pidió a usted que comparara la actitud del ex primer ministro Boiko Borisovcon los medios de comunicación. Usted respondió que sus servicios de prensa eran bastante insistentes por teléfono. ¿Qué quiso decir con esto?
Por supuesto, que ellos llaman y que hablamos a diario. Esto es normal. Lo importante es saber de qué temas y con qué frecuencia hablamos con ellos. Pero estos son asuntos internos que son parte de nuestras tareas periodísticas cotidianas, no somos una excepción. Si uno dice que ayer no había presiones y que se han presentado hoy le están mintiendo. Esta es una lucha cotidiana y es parte de la profesión. Otra cosa es conocer en qué momento sucumbe el periodista, hasta qué punto quiere ser objetivo …
Volvamos al periodismo de investigación: ¿Es más difícil ahora hacer una investigación en Bulgaria que hace cinco años?
A esta pregunta te podré responder el año que viene, ya que estoy haciendo una tesis sobre este asunto. Estudio todos los trabajos periodísticos de investigación realizados en los últimos años en bTV y Nova TV. Quiero ver cuáles son las tendencias en cuanto al número y tipo de temas tratados, así como lo que salió al aire en determinados períodos políticos. Creo que las conclusiones serán bastante sorprendentes. Se trata de un trabajo complejo, pero sólo entonces cuando se podrá afirmar a ciencia cierta… han circulado muchas suposiciones.
Permita que le insista: si usted hace un estudio de este tipo, significa que parte de algunas hipótesis. Mi hipótesis es que el número de periodistas que hacen periodismo de investigación en Bulgaria está en declive. ¿Está de acuerdo?
El periodismo de investigación es difícil por naturaleza y requiere demasiado esfuerzo; la cuestión es si tenemos suficientes periodistas para dedicar su tiempo y esfuerzo para lograr resultados. Dudo de que haya muchas personas dispuestas a hacerlo y capaces. No estoy segura de que sean las circunstancias actuales las que nos colocan en la situación de tener cada vez menos periodistas de investigación. Por supuesto, no descarto el efecto del mercado. El periodismo de investigación es caro y se lleva mucho tiempo, pero es la guinda del pastel.
¿Es más peligroso que hacer periodismo de investigación ahora?
No lo sé. Yo no me siento amenazada. No he recibido ninguna amenaza. Hay que analizar en profundidad la situación en Bulgaria para poder afirmar esto.
Hace unos días, dos corresponsales búlgaros de Deutsche Welle, Emi Baruh e Iván Bedrov, fueron despedidos por motivos éticas. Esto se interpretó más como que habían tocado ciertos intereses políticos. ¿Qué opina sobre esto?
Los invitamos a «Esta Mañana» el 25 de septiembre. Pude ver la carta del banco y la declaración oficial de Deutsche Welle. La posición de Deutsche Welle no está justificada ni es adecuada. ¿Cómo puede Deutsche Welle decir que las acusaciones hacia sus colegas son infundadas y a la vez despedirlos? Además, el trabajo de ambos periodistas siempre ha sido supervisado. ¿Dónde está la responsabilidad del redactor jefe en este caso? Tampoco entiendo el análisis de los representantes del banco. Los artículos en cuestión eran de opinión. Este tipo de artículo tiene sus particularidades, que no se han tomado en consideración. Iván y Emi me dijeron que son falsas las declaraciones de Deutsche Welle sobre que se habían saltado las normas. He trabajado con Ivan Bedrov en bTV y es un profesional excepcional. Estoy convencida de que se acercaba a la cuestión de forma profesional. Para mí, la actitud hacia ambos periodistas es un motivo para preocuparse y envía una mala señal.
¿Cómo espera que se desarrollan los acontecimientos a partir de aquí, en términos políticos, espera una escalada de presiones?
No tengo ni idea de por dónde irán las cosas, pero como periodistas lo primero es aclararnos nosotros mismos. Mientras trabajemos de forma profesional y por el interés público, vamos a estar en la mejor posición posible.