REPÚBLICA CHECA | Empleados del presidente checo agreden a periodistas
Reporteros Sin Fronteras (RSF) llama a las autoridades checas a condenar la violencia física que miembros del personal del presidente de Chequia, Milos Zeman, emplearon el sábado 27 de enero contra los periodistas. La organización considera que dicha agresión es indigna de una democracia.
Desde el domingo 27 por la tarde, las redes sociales y canales de televisión han estado difundiendo el vídeo del incidente, que muestra cómo los asesores presidenciales empujan y golpean a los periodistas, en un intento de evitar que grabasen a un partidario que se desmayó y se derrumbó cuando se anunciaron los resultados de las elecciones presidenciales.
Las imágenes muestran cómo un asistente le decía a un periodista que dejara de grabar, lo empujaba y arrojaba su cámara al suelo. Segundos más tarde, otro asistente se dirigía a un periodista diciéndole: «Vete, toma tus cosas y ve adonde Drahos [Jiri Drahos, el candidato derrotado en las presidenciales chacas]». Luego le propinó un par de puñetazos en la cara.
«Esto no servirá, llamaré a la policía», dijo el reportero, a lo que el atacante respondió: «estaré encantado de luchar contra ustedes». El asistente siguió atacando al periodista mientras sus colegas intentaban razonar con él y alejarlo. El primer asistente empujó después a un periodista del digital Seznam y arrojó al suelo su teléfono móvil para evitar que grabase.
«Condenamos enérgicamente los ataques contra varios periodistas mientras se anunciaba la victoria en la reelección del presidente Zeman», afirma Pauline Adès-Mével, jefa del departamento para la Unión Europea y los Balcanes de Reporteros Sin Fronteras.
«Es inaceptable que los partidarios de un líder político de este nivel agredieran físicamente a periodistas que solo estaban haciendo su trabajo, que es dar las noticias». Tal comportamiento es indigno de una democracia y el entorno de Zeman debe condenar públicamente esta violencia».
El presidente Zeman tiene la costumbre de insultar y amenazar a los medios. En octubre pasado, durante una conferencia de prensa, saludó a los periodistas con un falso Kalashnikov. Unas semanas antes, amenazó con «deshacerse» de un periodista. En mayo, dijo que los periodistas deberían ser «liquidados» porque «hay demasiados». Al parecer, alentados por tales comentarios, sus ayudantes y colaboradores ahora agreden físicamente a los reporteros.
Considerada durante mucho tiempo como un modelo de integración en la Unión Europea, la República Checa es hoy una fuente de preocupación creciente por las amenazas a la libertad de prensa, preocupación que se ha visto reforzada por la violencia del sábado.
La República Checa ocupa el puesto 23, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de Libertad de Prensa 2017 de Reporteros Sin Fronteras.
