FRANCIA | RSF reclama el derecho a la confidencialidad de las fuentes en el caso Mohammed Merah

Reporteros Sin Fronteras lamenta la respuesta desproporcionada y punitiva de las autoridades francesas a la difusión, en TF1, de algunos extractos de la conversación entre la policía y el asesino de Toulouse, Mohammed Merah. El Consejo Audiovisual ha convocado a la empresa productora del programa «Sept à Huit» y a los medios que han emitido las grabaciones.

«Una vez más se está poniendo en riesgo el principio de protección de las fuentes, a pesar de lo que dice la ley del 4 de enero de 2010», denuncia Reporteros Sin Fronteras. La organización manifiesta su apoyo a la productora de Emmanuel Chain, Elephant et Cie, que se ha negado a entregar las cintas de las grabaciones a los investigadores. «Además, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (CEDH) ha condenado a las autoridades francesas hace poco por violar el derecho a la confidencialidad de las fuentes en un caso de filtraciones sobre dopaje en el ciclismo», recuerda RSF.

El 9 de julio de 2012, la Inspección General de la Policía Nacional (IGPN) llegó a la sede de Elephant et Cie, productora del programa «Sept à Huit», que se emite en el canal TF1, para pedir los registros de las grabaciones completas de Mohammed Merah. El día anterior, el canal había emitido pequeños extractos, pero informó que posee más de cuatro horas de grabación.

Reporteros Sin Fronteras es consciente de la emoción de las víctimas del Merah, pero el respeto éstas no puede mermar el derecho a la información en un caso de interés público. Cada medio de comunicación deberá juzgar, con plena responsabilidad, si desea o no difundir los extractos de las últimas conversaciones del asesino de Tolouse con la policía. En todo caso, si decidieran hacerlo, no estarían haciendo nada ilegítimo» manifiesta RSF.

Las conversaciones difundidas en TF1 tienen un carácter informativo innegable: es la primera vez que se muestra el apartamento de Mohammed Merah desde un punto de vista distinto a la versión oficial. Los registros ayudan a construir el perfil del asesino y a desmontar la reciente teoría de la conspiración. Al contrario de lo que alega el Consejo Audiovisual, no contienen nada que pueda afectar a la memoria de las víctimas. Tampoco ponen en peligro la investigación en curso, como afirma el abogado Christophe Bigot.

Este incidente recuerda la necesidad de modificar la ley sobre el secreto de las fuentes y precisar con exactitud cuándo se admiten excepciones. Reporteros Sin Fronteras espera que el gobierno actúe pronto en consecuencia con sus recientes declaraciones al respecto.