TURQUÍA | Seis meses encarcelados a la espera de juicio
RSF recuerda la situación de los dos principales periodistas de investigación del país: Ahmet Sik y Nedim Sener, los cuales llevan seis meses en prisión acusados de falsos cargos de terrorismo.
«Estos dos periodistas llevan meses detenidos sin ninguna justificación y el juicio no ha comenzado aún», recuerda Reporteros Sin Fronteras. «Cada día que pasan en la cárcel es un escándalo que mancha la imagen de la democracia turca. Aunque las autoridades judiciales siguen retrasando el inicio del juicio, resulta vital que en la primera instancia sean puestos en libertad condicional, será señal de que los tribunales turcos son parte del movimiento de la sociedad turca hacia una mayor democracia», reclama la organización.
La semana pasada, el fiscal Cihan Kansiz presentó finalmente una acusación formal ante un tribunal de Estambul, que deberá fijar una fecha para el juicio. Se trata de 14 imputados, entre ellos Sik y Sener, y otros nueve periodistas y escritores, acusados de escribir al servicio de una supuesta conspiración terrorista conocida como Ergenekon.
La mayoría de los otros acusados trabajaban para Oda TV (odatv.com) y fueron detenidos entre el 18 de febrero y 3 de marzo de 2011.
Aún no está disponible el texto completo de la acusación, de 134 páginas, pero se han conocido detalles que hacen pensar que no ha cambiado la retórica paranoica planteada por la fiscalía general desde el indico de los interrogatorios.
Será interesante ver si la investigación de seis meses ha permitido a los fiscales reunir más pruebas, especialmente contra Sik y Sener, que las derivadas de los interrogatorios iniciales, de donde sólo se obtuvieron acusaciones salvajes.
Algunos de los jueces que han tenido que prorrogar la detención de los imputados, solicitada mensualmente por la fiscalía, han expresado su indignación por el proceso. Seref Akçay, el Presidente de la Cámara 11 del Tribunal de lo Penal de Estambul, manifestó que «la investigación no respeta los principios de imparcialidad, justicia y moralidad».
También señaló que los acusados no están en condiciones de poner en peligro la evidencia que manifiesta la policía. «El Libro [que había sido escrito por Sik y fue causa de su detención] aún no había sido publicado y por lo tanto no se podía acusar a los periodistas de «propaganda en apoyo a la organización terrorista», si todo lo que habían hecho era criticar el jucio a los miembros de Ergenekon, sin expresar su apoyo o alabar la organización».
La esposa de Sik, Yonca, después de visitarle en la cárcel de Silivri, el 4 de septiembre, manifestó a Reporteros Sin Fronteras: «Ahmet está bien, pero está impaciente por conocer la fecha de publicación de su libro y la fecha del juicio. Sólo tiene problemas en la rodilla. Los médicos dicen que va a necesitar una operación en el menisco. El médico de la prisión le prescribió un soporte para la rodilla, pero las autoridades carcelarias me impidieron que se lo diera. Nedim Sener también está bien. Ha perido peso porque está haciendo mucho ejercicio».
Depués de pasar tres días bajo custodia policial, Sik y Sener fueron trasladados a la prisión el 6 de marzo, junto a sus colegas de la Oda TV. Su arresto y los cargos absurdos que se les imputaron produjeron una oleada de protestas en Turquía y en el extranjero. Sus detenciones simbolizan la actitud paranoica del sistema judicial y el abuso del uso de la detención preventiva.
Estos periodistas están pagando un precio muy elevado por su cobertura crítica sobre un tema extremadamente sensible, una supuesta red clandestina de oficiales del ejército, laicista y ultranacionalista, denominada Ergenekon a los que se les acusa de organizar un golpe de estado contra el gobierno central islámico del AKP. El arresto de los militares supuestamente conspiradores, en 2007, fue aclamado inicialmente como una victoria de la democracia. Pero las acusaciones de conspiración han sido vistas como un pretexto par la caza de brujas de miembros de la oposición.