INDIA | Golpeado y apuñalado hasta la muerte el respetado periodista Sai Reddy
Reporteros sin Fronteras expresa su profundo pesar por la muerte de Sai Reddy, un respetado periodista que el 6 de diciembre fue golpeado y apuñalado hasta la muerte por presuntos rebeldes maoístas en Basaguda, en la turbulenta región de Bastar, en el estado indio de Chhattisgarh.
«Condenamos con firmeza el asesinato de Reddy y ofrecemos nuestras sinceras condolencias a su familia y compañero», ha declarado Reporteros Sin Fronteras. «El nivel actual de la violencia contra el personal de los medios de comunicación en la India es inaceptable. La policía debe esclarecer este espantoso crimen y averiguar si el motivo estaba relacionado con el trabajo de Reddy como periodista”.
«La muerte de Reddy es un símbolo de las dificultades a las que se enfrentan los periodistas en la región de Bastar, donde les amenazan tanto las autoridades como los maoístas. Muchos periodistas han tenido que huir de la región por razones de seguridad. Quienes cubren los acontecimientos de Bastar y se dedican al periodismo de investigación no deben convertirse en víctimas de este conflicto».
Un grupo de presuntos maoístas armados con cuchillos atacaron Reddy en un mercado cerca de su casa, dejándolo en un charco de sangre cuando huyeron. Murió mientras era trasladado al hospital.
Reddy tenía unos 50 años de edad y trabajaba en el diario Deshbandhu; había sido blanco de ataques por parte de las autoridades y los maoístas en relación con sus reportajes de investigación de la insurrección naxalita (maoísta).
Se le impuso una pena de prisión en 2008 por sus supuestos vínculos con los maoístas, mientras que los maoístas, acusándolo de vínculos con las fuerzas de seguridad, prendieron fuego a su casa y lo amenazaron de muerte, lo que le obligó a abandonar Chhattisgarh. Sólo se le permitió volver tras pedir disculpas a los maoístas.
La negativa de Reddy a participar en un movimiento antinaxalitas entre 2005 y 2008 le acarreó fama de simpatizante maoísta. Al igual que muchos otros periodistas en la región, no vivía exclusivamente del periodismo y completaba sus ingresos con la venta de cereales.
Con el puesto 140 -entre 170 países- en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2013 de RSF, la India sufre una oleada sin precedentes de violencia contra los trabajadores de los medios de comunicación. Al menos ocho periodistas han sido asesinados este año. Para ver una cifra similar hay que remontarse a 1997, cuando murieron siete.