UCRANIA | RSF pide el fin de la censura a las redes sociales rusas
Reporteros Sin Fronteras condena la prohibición impuesta a las redes sociales rusas por parte de las autoridades ucranianas la semana pasada. La medida es desproporcionada y afecta seriamente al derecho del pueblo ucraniano a la información y la libertad de expresión.
El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, puso en marcha el lunes de la semana pasada un decreto que bloqueaba las redes sociales Vkontakte y Odnoklassniki, así como el servicio de mensajería mail.ru y el buscador Yandex.
Al menos 19 webs de información y 13 periodistas individuales constan también en la lista de 1.228 personas y 468 empresas afectadas por las nuevas sanciones. Las medidas afectan mayoritariamente a medios oficiales rusos y simpatizantes de Moscú, pero también hay sanciones independientes como la RBC. Los principales proveedores ucranianos ya han empezado a bloquear el acceso a estos espacios de Internet.
“Como conscientes de los retos de seguridad a los que se enfrentan las autoridades ucranianas, pero ello no justifica de ninguna manera una censura de este tipo”, afirma Johann Bihr, responsable de la oficina de Europa del Este y Asia Central de Reporteros Sin Fronteras.
“Bloquear estas redes sociales, servicios de mensajería y enteras organizaciones de medios no sólo es una medida desproporcionada, sino que no está justificada para los propósitos que persigue. Con este decreto Poroshenko ha puesto un serio impedimento al derecho a la información y la libertad de expresión del pueblo ucraniano y ha incumplido sus compromisos internacionales”, recuerda Bihr.
La libertad de expresión, garantizada por el Convenio Europeo de Derechos Humanos y el Convenio Internacional de Derechos Civiles y Políticos -firmado por Ucrania- es un derecho que sólo puede limitarse de manera legal, legítima y por motivos estrictamente necesarios en una sociedad democrática.
Las redes Vkontakte y Odnoklassniki están entre los espacios más visitados en Ucrania, junto con mail.ru y Yandex, que tienen 12 y cinco millones de usuarios respectivamente.
Reporteros Sin Fronteras lleva tiempo alertando de los abusos de la guerra de información entre Ucrania y Rusia. En enero de este año, la Radio Nacional Ucraniana y el Consejo de Televisión prohibieron la retransmisión del canal ruso independiente Dozhd.
Kiev ha argumentado que los sitios rusos estaban diseñados para proteger a los datos personales de los usuarios ucranianos. Las medidas de vigilancia masiva del Servicio Federal de Seguridad Ruso están bien documentadas pero el Gobierno no posee esos datos personales y censurar Internet no va a conseguir proteger esos intereses.
Moscú usó en 2014 el pretexto de impedir la vigilancia estadounidense para justificar una nueva legislación que requería a las empresas que poseen datos personales de ciudadanos rusos utilizar exclusivamente servidores en Rusia.
Pese a las reformas de los últimos años para hacer más transparente la propiedad de los medios y aumentar la independencia de los servidores estatales, lo cierto es que el control de la industria por parte de algunos oligarcas y la guerra de información con Rusia, han llevado a Ucrania a ocupar el puesto 102 de los 180 países que conforman la actual Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa que elabora anualmente Reorteros Sin Fronteras.
Además, hay partes del este del país controladas por grupos separatistas donde no pueden acceder periodistas extranjeros ni freelance. Crimea se está convirtiendo en un “agujero negro de información” ante la ausencia de periodistas y organizaciones críticos con la anexión.