IRAK | Asesinados dos reporteros en un clima de permanente inseguridad
Reporteros sin Fronteras condena de forma enérgica el asesinato, el 5 de octubre de 2013, del corresponsal de Al-Sharqiya TV Mohamed Karim Al-Badrani y de su camarógrafo, Mohamed Al-Ghanem , en Mosul, a 400 km al norte de Bagdad, en la provincia de Ninawa.
Los dos periodistas del canal privado iraquí Al-Sharqiya TV estaban tratando de hacer un informe sobre la preparación la Fiesta del Cordero (Eid al-Adha) en el mercado de Al-Sarjakhaneh, en el centro de Mosul, cuando unos hombres armados abrieron fuego contra ellos, y les dispararon a la cabeza .
Según un corresponsal de la cadena, sus dos colegas habían recibido numerosas amenazas de muerte de grupos armados por sus reportajes sobre las fuerzas del orden de Mosul, aunque no se los habían tomado en serio.
«Nuestras más sinceras condolencias a las familias de los dos periodistas y sus compañeros. Pedimos a las autoridades que abran una investigación independiente para esclarecer las circunstancias exactas de este doble asesinato y llevar ante la justicia a los responsables e instigadores. Este acto atroz no debe quedar impune «, afirma Reporteros sin Fronteras.
«Este doble asesinato revela el deterioro de la seguridad la que ejercen los profesionales de la información, convertidos cada vez más en objetivos por causa de su trabajo. A las autoridades iraquíes les corresponde que puedan desempeñar sus funciones sin temer por su seguridad «, añade la organización.
El 18 de septiembre de 2013, Hassan Al-Shamari , corresponsal de Al-Mada Press , fue víctima de un intento de secuestro por parte de la guardia personal del gobernador de Diyala, Omar Al-Hamiri. El periodista asistió a una rueda de prensa durante la cual el gobernador atacó verbalmente al canal local al periodista Al-Hadi Anbaki, de la cadena local Al-Hurra Irak.
Hassan Al-Shamari grabó el altercado y los escoltas del gobernador atacaron al periodista después de la conferencia de prensa. Intentaron sacarlo a la fuerza de su automóvil y lo golpearon varias veces. Luego trataron de meterlo en su propio vehículo antes de que interviniese la policía. Los agresores lograron escapar.
El ataque se producía un días después de que el primer ministro de Irak, Nouri al-Maliki pronunciase un discurso en el que acusaba a algunos canales de centrarse en los aspectos negativos de las noticias y de luchar contra los políticos, además de culparlos de adoptar un discurso religioso.
El 13 de septiembre de 2013, el jefe de policía de Bagdad, Ali Abdel-Amir, ordenó el cierre de las oficinas del canal local Al-Baghdadia TV por tercera vez en lo que va de año. Requisaron casi todo el material y los equipos de la cadena. Este cierre ocurre después de que la Comisión de Comunicaciones y Medios de Comunicación (CMC) reprochara a Al-Bahgdadia TV su falta de “profesionalidad en el discurso mediático”. El CMC se ha negado a renovar la acreditación de la cadena, relegándola a la ilegalidad.
El Sindicato de Periodistas Iraquíes ha denunciado esta nueva injerencia de la Comisión y la falta de una decisión judicial que ordene el cierre de la cadena.
Fundada en 2003, la Comisión estaba destinada a convertirse en un órgano regulador sin fines de lucro y totalmente independiente. Con el tiempo, ha recibido fuertes críticaspor su falta de independencia, y porque sus decisiones afectan a la libertad de prensa.
El 6 de octubre 2013 en virtud de la decisión del CMC de cerrar todas las oficinas de Al-Baghdadia TV, la policía provincial de Dhi Qar arrestó a todo el personal del canal en Nasiria. El director de la delegación local de la cadena, Riad Al-Ismaili fue puesto en libertad bajo fianza al día siguiente, pero los fotógrafos Maher Al-Saeeh y Shamm Riadh siguen detenidos.