AFGANISTÁN | El Gobierno afgano debe garantizar la seguridad de los periodistas
Reporteros Sin Fronteras se siente muy preocupada por el aumento de agresiones a los periodistas en Afganistán así como de las sanciones a los medios. Desde que comenzó el año, dos radios han sido clausuradas y al menos 12 periodistas agredidos o interpelados por la policía en diferentes regiones del país.
“Hacemos un llamamiento a las autoridades para que asuman su deber de garantizar la seguridad y el derecho a informar. La actitud de confrontación de de las autoridades, pone en peligro la libertad de expresión. Hay que acabar con las amenazas y la impunidad” declaró RSF.
El pasado 27 de febrero, Taymour Shah Sahzadeh, periodista y director de la radio Galat Jagh, en la provincia de Zabol (sudeste del país) fue detenido durante cuatro horas por la policía. Paralelamente la emisión de su radio fue suspendida. El 3 de marzo, el redactor jefe, Abdolsedigh Mirvissi, confirmó su cierre y comentó: “La causa ha sido la retransmisión de una manifestación que protestaba por la corrupción y por la emisión de un discurso de un diputado que hablaba sobre el mismo tema”,
Radio Galat Jagh puede emitir gracias al apoyo del ISAF ( Las Fuerzas Internacionales).
El 14 de febrero, Radio Nassim, otra emisora local de la población de Daykandi (centro del país) fue víctima de la presión ejercida por el gobernador, el jefe de la policía y los responsables locales del Ministerio de Información y Cultura. Mohammad Reza Vahedi, director de la radio declaró que “el gobernador había prohibido a los funcionarios responder a las preguntas de la agencia Pajhwok. También el Ministerio de Información y Cultura, tras una de nuestras emisiones sobre la seguridad en la provincia, insistió ilegalmente a que nosotros les facilitásemos las fuentes”.
Tanto el gobernador como el responsable local de ministerio desmintieron estas informaciones pero los datos recogidos por RSF confirman las presiones llevadas a cabo hacia los medios independientes.
El 24 de febrero en la ciudad de Jalalabad una docena de periodistas fueron agredidos y amenazados por los servicios de seguridad mientras cubrían un ataque a la policía por parte de algunos ciudadanos. Yad Zyar Khan, periodista de la TV Jondon, dijo a los medios de comunicación:“ Fui agredido en tres ocasiones e lo largo de 15 minutos mientras filmaba el evento. Ocurrió lo mismo que hace un mes en la ciudad de Kabul, en donde varios periodistas fueron víctimas de la violencia de las fuerzas de seguridad”.
Y es que el 17 de febrero en la provincia de Badakhshan , al norte de Kabul; un periodista y un realizador fueron amenazados por unos desconocidos que se presentaron como personas próximas a la autoridad. Hamed Abidi, director del semanario Les Jeunes Actifs, fue amenazado por teléfono tras la publicación de un artículo que hablaba de la construcción de un aparcamiento privado en la ciudad de Kabul. La fotografa Farzaneh Vahedi también recibió amenazas tras hacer un reportaje sobre las actividades de una asociación de ayuda a las mujeres.
RSF se siente también preocupada por las acusaciones de las autoridades afganas contra los medios y los periodistas y de sus restricciones hacia la libertad de expresión. El pasado 26 de febrero, el Consejo de Ministros prohibió la utilización de lenguas extranjeras en la radio y televisión. Ya en octubre de 2012 el Presidente Karzai ordenó al Ministerio de Información y Cultura hacer un seguimiento de los medios que ataquen “el interés nacional”.
Dicho termino está siendo utilizado habitualmente por las autoridades para prohibir emisiones de televisión. Las acusaciones de: “interés nacional”, de «anti islamismo” y “de utilización de acentos extranjeros” son las principales causas de censura.
Afganistán esta situado en el puesto 128 en la clasificación de la libertad de prensa 2013, realizada por RSF.