ALEMANIA | Sentencia histórica contra la agencia de Inteligencia
La agencia de inteligencia extranjera de Alemania BND no tiene permitido recabar ni almacenar los detalles de los registros de las llamadas de la sección alemana de Reporteros Sin Fronteras en su sistema de análisis de metidos «VerAS”. Así lo ha decidido, el 27 de diciembre, el Tribunal Federal Administrativo de Leipzig, respondiendo a las demanda de RSF-Alemania. Esta decisión judicial pone límites a la BND por primera vez en su recopilación de metadatos.
“La decisión judicial demuestra que merece la pena que las organizaciones de derechos humanos acudan a los tribunales a defenderse de las prácticas de almacenamiento masivo de datos de la BND”, afirma el director ejecutivo de la sección alemana de Reporteros Sin Fronteras, Christian Mihr.
“La decisión es un éxito histórico para Reporteros Sin Fronteras porque hemos conseguido limitar las actividades de la BND. Al mismo tiempo fortalece nuestras propias actividades porque los periodistas perseguidos en estados autoritarios como Uzbekistán o China necesitan poder confiar en que sus comunicación con nosotros seguirán siendo confidenciales”, añade Mihr.
RSF Alemania había presentado la denuncia contra la BND ante el Tribunal Federal Administrativo, el tribunal de primera y última instancia por este caso, el 30 de junio de 2015, con la representación del abogado Niko Härting. La denuncia está dirigida entre otras cosas contra el sistema VerAS que ha permitido también a la BND recopilar información de ciudadanos alemanes desde 2002 sin ninguna base legal.
Las comunicaciones “de señales extranjeras-extranjeras”, como se denomina a las mantenidas entre personas en Alemania con personas en el extranjero y los detalles de las llamadas que le dieron a la BND otros servicios de Inteligencia se ven afectados con estas medidas. El almacenamiento es tan completo que puede incluir a aquellos periodistas que han sido conectados sólo indirectamente a través de terceros con, por ejemplo, un sospechoso de terrorismo.
En la audiencia que tuvo lugar en diciembre de 2016, RSF Alemania obtuvo una victoria parcial cuando el Tribunal Federal Administrativo ordenó a la BND que aclarase cómo recopilaba sus datos. En la audiencia, los representantes de la BND tuvieron que admitir que el sistema VerAS puede usarse para analizar “hasta 14 niveles” de contacto.
En otra sección de la denuncia, RSF-Alemania acusaba a la agencia de Inteligencia de espiar sus correos electrónicos con socios extranjeros, periodistas y otras personas a través de las señales de vigilancia de Inteligencia. En diciembre de 2016, el tribunal consideró que esta parte de la denuncia era inadmisible. En abril de 2017 el Tribunal Federal Constitucional en Karlsruhe rechazó admitir la petición de RSF para que revisara dicha decisión alegando que RSF no había demostrado lo suficiente ser una organización directamente afectada por la vigilancia de la BND.
Por este motivo RSF-Alemania llevó el caso en diciembre ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos para que analizara las prácticas de la vigilancia masiva de la BND.
Alemania ocupa en la actualidad el puesto 16 de los 180 países que conforman la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa elaborada anualmente por Reporteros Sin Fronteras.