La madrugada del 13 de septiembre dos indivíduos lanzaron una bomba contra las instalaciones de Rádio Farol FM, destruyendo completamente el estudio que tiene la emissora en la localidad de União dos Palmares, en el estado de Algoas.
La policía no descarta el móvil político. Los hechos se producen a escasos días de las elecciones municipales del 7 y 28 de octubre, en una campaña electoral llena de intentos de censura, incautación de periódicos y sentencias judiciales. Reporteros Sin Fronteras advierte que un atentado de estas características podría inducir a la autocensura, en detrimento de una información plural, especialmente necesaria en un contexto como el actual. La organización espera que la investigación en curso de pronto con los responsables e insta también a los medios de comunicación -que en muchos casos pertenecen a candidatos electorales- a respetar las reglas de la equidad en tiempo de antena dedicado a cubrir la campaña. «Se trata de defender, tanto el espíritu democrático, como su propia seguridad», advierte la organización.
Rádio Farol FM pertenece al diputado federal del Partido Ecológico Nacional, João Caldas, y es conocida por su línea editorial, crítica con la gestión del alcalde de União dos Palmares, Areski Freitas (del Partido Trabalhista Brasileiro, PTB). La víspera del atentado emitió un debate entre este último y el antiguo gobernador, Manoel Gomes de Barros (del Partido da Social Democracia Brasileira, PSDB), candidato a sucederle como alcalde de União dos Palmares.
Según ha declarado Lucas Garcia a la prensa local, los autores del atentado aprovecharon el intervalo entre la salida del último guardia nocturno, a las cuatro de la madrugada, y el inicio del turno del primer periodista de la mañana, causando graves estragos estimados en casi 10.000 euros.
Reporteros Sin Fronteras pide que no se descarte el móvil político en un contexto de repetidas maniobras destinadas a dificultar o censurar a los medios de comunicación y blogs considerados hostiles a los intereses que se mueven en la campaña. En el estado de Rio de Janeiro se compraron de forma masiva 400 ejemplares de los días 4 y 5 de septiembre del diario O Dia. En paralelo, varias sentencias judiciales han contribuido también a la censura durante la campaña electorial. Uno de los casos más especulares ha sido el bloqueo de la difusión del diario Correio do Estado, en Mato Grosso de Sul, después de haber publicado una encuesta sobre intención de voto.
Pero las decisiones judiciales varían según el estado: En Paraná, el Tribunal Regional Electoral admitió a trámite la queja presentada por el candidato Gustavo Fruet (del Partido Democrático Trabalhista, PDT) contra la web Datafolha por publicar otra encuesta de intención de voto; mientras que en el estado de Ceará, un tribunal homólogo autorizó la difusión de la encuesta encargada por el periódico O Povo y publicada por Datafolha.
El periodista y bloguero Fernando Conceição denunció, el 3 de septiembre, un intento de censura por parte del candidato a la alcaldía de Salvador da Bahia, Mário Kertész (del Partido do Movimento Democrático Brasileiro, PMDB), que pidió a la justicia la suspensión de cualquier referencia en el blog del periodista a un caso de desvío de fondos públicos. Los tribunales desestimaron la petición de Kertész, pero el bloguero Tarso Cabral Violin, no tuvo la misma suerte y ha sido multado, por el Tribunal Regional Electoral de Curitiba, a dos multas por un valor total de 40.000 tras la denuncia interpuesta por el alcalde de la ciudad Luciano Ducci (PSDB), por publicar dos encuestas de intención de voto.
