Reporteros Sin Fronteras (RSF) condena la decisión «absurda y peligrosa» del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, de autorizar que determinados periodistas porten armas de fuego para su protección personal.
Según un breve decreto firmado por el presidente el 7 de mayo y publicado al día siguiente en el diario oficial, los «periodistas profesionales que cubren el crimen» se encuentran entre las múltiples categorías de ciudadanos que ahora pueden llevar armas de fuego en público. Entre las demás categorías se cuentan abogados, policías de tráfico y “residentes de áreas rurales”.
Esta decisión sorpresa, que no se ha visto precedida de ninguna consulta con organizaciones que representen a los medios de comunicación brasileños, sigue a un decreto anterior que Bolsonaro firmó el 15 de enero, pocos días después de haber prestado juramento, y que relajaba las reglas para adquirir armas de fuego, aunque no autorizaba a llevarlas en público, una de sus principales promesas de campaña.
«Esta decisión establece un precedente peligroso y no hace nada por resolver los problemas de seguridad que afrontan muchos periodistas brasileños», señala Emmanuel Colombié, director de la oficina de Reporteros Sin Fronteras en Latinoamérica. “Los periodistas cumplen con su gran responsabilidad de proporcionar noticias con las herramientas que usan para comunicarse y no con armas de fuego”.
Cuatro periodistas fueron asesinados en Brasil en 2018, en medio de un aumento de la vulnerabilidad de los reporteros independientes que cubren asuntos relacionadas con la corrupción, las políticas públicas y el crimen organizado en ciudades pequeñas y medianas.
El gobierno de Bolsonaro ha estado alimentando un clima de desconfianza y de confrontación con los medios de comunicación desde que asumió el cargo. RSF insta a las autoridades a centrar sus esfuerzos en prevenir los riesgos relacionados con la cobertura de temas delicados y en reforzar los mecanismos estatales para proteger a los periodistas.
Según el Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud, con sede en EEUU, en Brasil se produjeron más muertes por armas de fuego en 2016 que en cualquier otro país del mundo, incluidos Estados Unidos, India y México.
Brasil ha caído tres posiciones en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2019 que Reporteros Sin Fronteras publicó el 18 de abril pasado y ahora ocupa el puesto 105 en el ranking de 180 países. Ver también el Informe Anual de la organización.