COP29: RSF exige la liberación inmediata de los periodistas encarcelados y la protección del periodismo medioambiental en Azerbaiyán

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La 29ª Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático se inaugura en Bakú (Azerbaiyán), un país extractivista conocido por su violenta represión hacia la prensa libre e independiente. Reporteros Sin Fronteras (RSF) pide a la comunidad internacional que presione a Azerbaiyán para que libere a los periodistas y ponga fin a las graves violaciones de sus derechos.

Restricciones de acceso, violencia física y detenciones, es a lo que se enfrentan los profesionales de los medios en Azerbaiyán. En el petro-Estado que obtiene más del 90% de sus ingresos de la exportación de hidrocarburos, los periodistas que cubren temas sensibles, como el medio ambiente, trabajan en un entorno sumamente peligroso. En el último año, las autoridades han detenido a una quincena de reporteros por su trabajo, como Nargiz Absalamova, que fue arrestada por investigar temas medioambientales y es una de los trece profesionales de los medios actualmente en prisión.

«Dar ejemplo en materia de protección del periodismo, en particular del periodismo medioambiental, debería ser un requisito previo para albergar una conferencia de Naciones Unidas sobre el clima. ¿Cómo podemos aceptar que un país petrolero que encarcela a las voces independientes acoja unas negociaciones que determinarán el futuro del clima mundial? RSF hace un llamamiento a la comunidad internacional para que exija a las autoridades azerbaiyanas la liberación de los reporteros encarcelados, ponga fin a las flagrantes violaciones de la libertad de prensa y se comprometa de una vez a proteger el periodismo independiente”.

Jeanne Cavelier | Responsable del Área de Europa del Este y Asia Central de RSF

Cubrir las desastrosas consecuencias medioambientales, sanitarias y climáticas de la extracción de hidrocarburos y minerales en Azerbaiyán es especialmente difícil y peligroso para los profesionales de los medios. Nargiz Absalamova fue detenida el 30 de noviembre de 2023, acusada falsamente de “contrabando de divisas”. La reportera trabajaba para Abzas Media, uno de los pocos medios independientes que quedan en el país. En junio de 2023, Absamalova cubrió las manifestaciones de los habitantes de Söyüdlü, pueblo del oeste de Azerbaiyán afectado por los residuos tóxicos de una mina de oro a cielo abierto. Protestaban contra un nuevo proyecto de lago artificial destinado a recoger los desechos contaminados con cianuro y arsénico procedentes de las explotaciones mineras. La policía dispersó brutalmente a la multitud pacífica y expulsó violentamente a tres periodistas, entre ellos Nargiz Absalamova. Dos semanas después, su colega Elmaddin Shamilzade fue acosado, torturado y amenazado con violencia sexual en un intento de obligarle a revelar el código de acceso de su teléfono y borrar las fotos de la protesta.

Hasta la fecha, Absalamova, cuatro de sus compañeros de Abzas Media y otros ocho periodistas de medios independientes, entre ellos Toplum TV, están sufriendo malos tratos o condiciones humillantes en prisión, según ha denunciado periódicamente Sevinj Vagifgizi, director de Abzas Media y compañero suyo en el centro de detención preventiva de Kurdakhani. Nargiz Absalamova se enfrenta a una pena de hasta 12 años de prisión y se le niega las visitas de su familia. 

Según un reciente informe global publicado por RSF, dos tercios de los hidrocarburos se extraen en países donde la libertad de prensa está gravemente amenazada. Azerbaiyán, caso paradigmático de país extractivista donde el periodismo medioambiental está gravemente reprimido, figura entre los peores países del mundo en materia de libertad de información, y ocupa el puesto 164 de 180 países en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2024 de RSF