Reporteros Sin Fronteras condena la decisión de las autoridades de la cárcel de Kality, de restringir las visitas familiares a la periodista Reyot Alemu, columnista del semanario Fitih, encarcelada desde junio de 2011, después de haber sido condenada por «participar en la promoción y difusión de actividades terroristas».
Alemu, galardonada con el Premio UNESCO Guillermo Cano de la Libertad de Prensa 2013, cumple una sentencia de cinco años de cárcel, después de que el Tribunal Federal Supremo le redujera su condena original de 14 años de cárcel.
«Negarle a Alemu las visitas de sus familiares pone en riesgo su salud mental. Este deterioro de su situación se suma a las ya de por si deplorables condiciones de encarcelamiento a las que lleva más de dos años sometida», denuncia Reporteros Sin Fronteras, que pide su inmediata e incondicional puesta en libertad.
Reyot Alemu fue detenida, en noviembre de 2011, junto con Woubeshet Taye, antiguo editor del semanario Awramba Times. Ambos fueron trasladados, el 19 de abril, a un centro de detención de Ziway, deliberadamente alejado de la capital, donde reside la familia de Alemu. Ya entonces, Reporteros Sin Fronteras denunció las condiciones de encarcelamiento a las que estaba sometida y el riesgo para su salud mental.
RSF ha presentado ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas varias recomendaciones de cara a mejorar la libertad de prensa en Etiopía con motivo de la 19 Revisión Periódica Universal que tendrá lugar en el país los meses de abril y mayo de 2014. Entre otras, RSF destaca la necesidad de revocar la ley antiterrorista de 2009 que ha servido para detener a periodistas críticos con el Gobierno como Alemu y Taye.
