INTERNET / CORONAVIRUS | RSF condena las restricciones de acceso a información online en varios países
Mientras la epidemia de Covid-19 continúa extendiéndose por todo el mundo, Reporteros Sin Fronteras (RSF) hace un llamamiento a los gobiernos que están restringiendo el acceso a internet y bloqueando sitios web, para que restauren el acceso del público a la información sobre este tema vital y permitan a los periodistas usar internet libremente para trabajar y publicar sus informaciones.
Los gobiernos de India, Etiopía, Irán y Egipto se cuentan entre los que están limitando el acceso a internet como fuente de información fiable e independiente sobre la crisis del coronavirus. Para obstruir el trabajo de los periodistas se utilizan aspectos como la velocidad de internet o las restricciones de acceso.
«Impedir el acceso a internet, especialmente a las webs de noticias, obstruye el trabajo periodístico y priva al público de una cobertura fiable e independiente sobre el coronavirus, lo que es esencial en este momento», apunta el secretario general de RSF, Christophe Deloire. “Estas medidas son flagrantes violaciones de la libertad de informar y del derecho a la información mientras nos encontramos inmersos en una crisis mundial de salud pública. Es esencial que se restablezca dicho acceso. Los gobiernos afectados tienen una enorme responsabilidad».
El 26 de marzo, India publicó una nota confirmando que las restricciones de acceso a internet continuarán en el territorio norteño de Jammu y Cachemira. A principios de marzo, seis meses después de desconectar por completo el acceso a internet en este territorio, India restableció una conexión muy lenta y limitada, lo que privó a los ciudadanos de Cachemira de noticias elaboradas de forma independiente y evitó que los periodistas locales trabajaran libremente.
La situación es similar en el oeste de la región de Oromia, en Etiopía, donde a varios millones de habitantes se les ha negado el acceso a internet y al teléfono durante el último mes. Esta medida se adoptó inicialmente con el objetivo de restablecer el orden después de los enfrentamientos entre el ejército y un grupo de rebeldes. Pero, desde la detección del primer caso de Covid-19 en Etiopía, el 13 de marzo, esta desconexión podría tener consecuencias desastrosas para la salud pública, ya que la población está privada de acceso a la información sobre la epidemia y los periodistas no pueden cubrir este tema tan importante.
Se han detectado restricciones en la velocidad de internet en Irán, donde los medios de comunicación del gobierno continúan ocultando la realidad del impacto del Covid-19. El 3 de marzo, el gobierno bloqueó temporalmente el acceso a la versión farsi de Wikipedia. Irán ha utilizado cada vez más los recortes de internet para limitar la circulación de noticias independientes.
En Egipto, el Consejo Supremo de Regulación de Medios ha suspendido webs y diarios digitales durante seis meses por «difundir noticias falsas» y ha presentado cargos contra sus propietarios. También ha publicado una línea directa a la que se puede llamar para dar cuenta de un contenido de internet que «pueda causar ansiedad pública». Actualmente están bloqueados más de 500 sitios web, incluidos los de RSF, la BBC y el canal de televisión Al-Hurra financiado por el gobierno de EEUU.
En una declaración conjunta publicada el 19 de marzo, las Naciones Unidas, la OSCE y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos instaron a los gobiernos a levantar todas las restricciones en internet. La ONU reconoce el acceso a internet como un derecho fundamental desde julio de 2016.