LIBIA | RSF pide medidas de seguridad para periodistas ante nuevos ataques y amenazas
Reporteros Sin Fronteras manifiesta su preocupación por los constantes ataques y amenazas a los periodistas libios mientras ejercen su profesión. Uno de los últimos casos es la agresión sufrida por los profesionales encargados de la cobertura de la conferencia «Reconciliación en el Sur de Libia», organizada por el Gobierno libio y el Congreso General Nacional (GNC), principalmente en beneficio de las tribus Tebu y Axlad Suleiman.
Después de una acalorada disputa durante la conferencia, los periodistas fueron expulsados de la sala por 20 miembros de seguridad vestidos de civil que les insultaron y amenazaron con armas y cuchillos. El corresponsal de la cadena Al-Aan TV, Mohamad Al-Gharyani fue golpeado violentamente en el pecho, como confirmó un exámen médico posterior, y Sadiq Al-Mabrouk, de Al-Naba TV, también fue agredido.
Mansour Ati, editor del periódico independiente Akhbar Ajdabiya, con sede en Ajdabiya, fue obligado a disculparse ante el ministerio de Asuntos Religiosos por publicar un poema sobre Mohammed Al-Shaltami, considerado una «apostasía». Además, se ha visto forzado a dimitir después de las incontables amenazas recibidas por parte de grupos armados, presuntamente vinculados a la milicia Ansar Al-Sharia. Las oficinas del diario fueron también saqueadas por supuestos miembros de dicha milicia.
Abdelfath Ibrahim Al-Darbi, de Al-Assima TV, ha denunciado haber recibido amenazas hace semanas que atribuye a las mismas personas que atacaron a su cadena, en marzo. Las amenazas aseguraban encontrarle en Kuwiat y Jordania, dos países en los que también reside habitualmente.
Reporteros Sin Fronteras recuerda que los periodistas juegan un papel fundamental en la construcción de cualquier sociedad democrática y urge a las autoridades libias a tomar las medidas necesarias para garantizar su seguridad. A pesar de los muchos retos a los que se enfrenta el Gobierno de transición libio en materia de seguridad y formación de sus fuerzas armadas, Reporteros Sin Fronteras no puede dejar de instar con carácter de urgencia a las nuevas autoridades libias a que hagan todo lo posible por evitar estos ataques y amenazas a periodistas. La organización subraya también que el gobierno de transición tiene el deber de cumplir sus compromisos, tanto nacionales como internacionales, de proteger los derechos fundamentales, el derecho a la libertad de información y el derecho a la libertad de expresión.
«Resulta determinante para el futuro de libia que el nuevo Estado implante pronto medidas legislativas que garanticen la seguridad de los periodistas y el libre ejercicio de su profesión sin sentirse amenazados, intimidados o sin ser atacados», concluye la organización.
