Reporteros Sin Fronteras manifiesta su preocupación por el proceso judicial que acusa al periodista Justin Brake de invadir la propiedad de una hidroeléctrica mientras cubría una manifestación. RSF lo considera una seria violación a la libertad de prensa y pide a la justicia que retire inmediatamente toda acción contra el periodista.
Justin Brake, periodista y editor de The Independent, había cubierto las manifestaciones indígenas sobre derechos de tierras reivindicados contra el proyecto de la hidroeléctrica Muskrat Falls en Labrador. El 21 de octubre, un grupo de manifestantes atravesó una entrada de las instalaciones de la hidroeléctrica y el periodista les siguió para cubrir los hechos. Supo después que había sido incluido en una lista del Tribunal Supremo de Newfoundland y Labrador por entrar en la propiedad de Muskrat Falls y que las autoridades, que amenazaron con detenerle, no le identificaron como un periodista en el ejercicio de su profesión.
El abogado de Brake defendió ante el tribunal, el 1 de noviembre, para reivindicar que el periodista estaba en la protesta como tal, ejerciendo el derecho a la libertad de prensa protegido constitucionalmente.
La próxima audiencia está prevista para el 7 de diciembre. “Estamos preocupados porque un tribunal pueda condenarle por invasión de la propiedad por el mero hecho de ejercer el periodismo y cubrir las protestas medioambientales que son del interés público canadiense”, afirma Delphine Halgand, directora de la oficina de RSF en Washington. “Parece que se están usando este tipo de procedimientos legales para intimidar a los periodistas e impedirles cubrir este tipo de eventos, lo que supone una seria violación a la libertad de prensa y el derecho a la información en canadá”, advierte Halgand.
Brake ha explicado en una entrevista porque decidió seguir a los manifestantes a través de la entrada: “No dudé, conocía mi deber y mi responsabilidad como periodista de cubrir la historia… Las personas finalmente se están organizado y es por este proyecto hidroeléctrico. Por eso sabía que lo que pasara tras esa entrada eran unos hechos que la provincia y el país tenían que conocer”.
El caso de Justin Brake se produce un mes después de que la periodista estadounidense Amy Goodman fuese acusada de allanamiento criminal por cubrir las protestas medioambientales contra laconstrucción de un oleoducto en Dakotadel Norte, en Estados Unidos. Unos hechos que demuestran una tendencia en ambos países a bloquear las protestas medioambientales.
Esta nueva violación a la libertad de prensa en Canadá es una de las muchas que están teniendo lugar en el país en los últimos meses. Canadá ocupa actualmente el puesto 18 de los 180 países que conforman la actual Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa elaborada anualmente por Reporteros Sin Fronteras.