| RSF pide prudencia en las informaciones sobre el paradero del periodista francés Rómeo Langlois
30.04.2012 18:09
Desde el pasado 28 de abril se desconoce el paradero del periodista independiente y corresponsal de France 24, el francés Roméo Langlois, visto por última vez en el departamento de Caquetá. Las autoridades colombianas manejan la versión de la desaparición mientras que el gobierno francés considera responsable a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), según expresó el Ministro de Asuntos Exteriores, Alain Juppé. No obstante, el 30 de abril, Juppé reconoció que no tenía «certeza absoluta» para sostener la versión del secuestro. Un día antes, las autoridades de Bogotá instaron a la guerrilla a «respetar su vida» en caso de que lo tuvieran en su posesión.
“Desafortunadamente estos giros y conjeturas ponen en evidencia la falta de elementos fiables sobre la desaparición de Langlois. En estas circunstancias se hace necesario un uso prudente de la información. El conflicto armado colombiano también implica la guerra de palabras y de medias verdades que pueden tener consecuencias peligrosas para sus víctimas. Las investigaciones deben continuar y no debe difundirse ninguna afirmación que pueda exponer a Langlois a más riesgos, en tanto su situación real no haya sido confirmada”, pide Reporteros Sin Fronteras.
Roméo Langlois desapareció el 28 de abril tras un enfrentamiento entre las FARC y un batallón de 24 militares y tres oficiales de la policía judicial encargados de una operación llamada Alquimia, para desmantelar laboratorios clandestinos donde se procesa cocaína. El gobierno asegura que un grupo formado por cien guerrilleros abrió fuego. Los disparos le costaron la vida al sargento encargado de la protección personal de Langlois y los cinco militares desaparecidos tras el ataque fueron encontrados con vida.
Según el periodista italiano Simone Bruno, también corresponsal de France 24, Langlois se quitó el casco y el chaleco antibalas durante el ataque para identificarse como civil. El reportero italiano explicó que, antes de la cobertura de las operaciones militares en la región, habían establecido un protocolo de seguridad, que incluía la comunicación regular con la familia de Langlois y con representantes diplomáticos. El mal tiempo impidió a los dos helicópteros que debían patrullar el convoy militar, garantizar su seguridad.
La noche del 29 de abril Bruno fue a Florencia (capital del departamento de Caquetá), en compañía de otras dos periodistas, con el fin de recuperar las pertenencias y el material de su compañero francés. El objetivo era obtener las grabaciones realizadas por Langlois el 28 de abril para conocer mejor las circunstancias del ataque. El periodista italiano aseguró que no dejará la región hasta conocer lo sucedido con Langlois.
Las FARC siguen controlando ciertos territorios, a pesar de la muerte de sus principales jefes (Manuel Marulanda, Raúl Reyes) y las últimas deserciones. A inicios del año 2012 la guerrilla anunció que ya no tomaría como rehenes a civiles.
Colombia se encuentra entre los países más peligrosos del continente para los periodistas y posee el triste récord de periodistas exiliados, tanto al interior como al exterior del país, amenazados por grupos armados –en especial paramilitares–, entre los que se encuentran narcotraficantes y algunas autoridades.