Desde el inicio de la invasión de Ucrania el 24 de febrero de 2022, Rusia ha tenido en el punto de mira a los periodistas, tanto ucranianos como internacionales, que no han dejado de informar sobre esta guerra. Los profesionales de los medios han sido tomados como rehenes, y han sido víctimas de desapariciones forzosas, fusilamientos o ejecuciones. Por ello, y en vísperas de que se cumpla el tercer aniversario del conflicto,  Reporteros Sin Fronteras (RSF) hace balance de la violencia ejercida contra los reporteros y rinde homenaje a todos aquellos que han continuado su labor informativa a pesar de los riesgos constantes.

«Cubrir la guerra en Ucrania implica arriesgar la vida: muertos, heridos, secuestrados, detenidos o desaparecidos… Desde el 24 de febrero de 2022, Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha documentado casi 150 casos de periodistas víctimas de la violencia rusa, basándose en la información obtenida con el apoyo de su socio ucraniano, Institute of Mass Information (IMI). El año 2024 ha estado marcado por la muerte de dos reporteros, mientras 18 siguen detenidos de manera arbitraria por el Kremlin y un periodista continúa desaparecido. RSF destaca la valentía y el compromiso de los periodistas ucranianos e internacionales que siguen adelante con su labor, a pesar de los constantes peligros».

Pauline Maufrais | Responsable regional de RSF en Ucrania

 

 

Desde el 24 de febrero de 2022, miles de periodistas ucranianos e internacionales han cubierto la invasión rusa en Ucrania, a pesar de un entorno de seguridad extremadamente peligroso, caracterizado por ataques indiscriminados y selectivos por parte de las fuerzas rusas. Reporteros Sin Fronteras (RSF) hace  balance de tres años de violencia dirigida contra los profesionales de los medios: 

  • 13 periodistas muertos a manos de las fuerzas rusas

En 2024, dos profesionales perdieron la vida durante la cobertura de la invasión rusa, lo que eleva  a 13 el número de reporteros fallecidos desde 2022, de los cuales 12 lo hicieron en territorio ucraniano. Ryan Evans, asesor de seguridad de la agencia de noticias británica Reuters, fue asesinado el 24 de agosto en un bombardeo que alcanzó su hotel en Kramatorsk, en el este de Ucrania. Menos de dos meses después, el 10 de octubre, la familia de la periodista independiente ucraniana Victoria Roshchyna recibió la noticia de su muerte a través de una carta oficial de las autoridades rusas. Detenida desde agosto de 2023, se cree que falleció el 19 de septiembre de 2024. A pesar de ello, Moscú sigue negándose a esclarecer las circunstancias de su muerte y a entregar su cuerpo a la familia.

  • Al menos 47 periodistas heridos

RSF ha documentado al menos 47 periodistas ucranianos y extranjeros heridos. Las regiones de Donetsk, Jarkov , Luhansk (este) y Kiev se encuentran entre las más peligrosas para la prensa. Muchos reporteros han sido atacados deliberadamente o tiroteados en redacciones o en lugares frecuentados por periodistas, como hoteles. Algunos han sido víctimas de «ataques de doble impacto», una táctica militar letal que consiste en bombardear nuevamente el mismo lugar, apuntando a quienes han acudido a cubrir las consecuencias del primer ataque.

  • 18 periodistas ucranianos retenidos por Rusia  

Las fuerzas armadas rusas mantienen retenidos a dieciocho periodistas ucranianos, arrestados  en los territorios ucranianos ocupados por negarse a colaborar. Acusados ​falsamente de  «terrorismo» o «espionaje» , nueve de ellos han sido condenados por tribunales rusos. Se encuentran detenidos en condiciones inhumanas y degradantes, en ocasiones a miles de kilómetros de Ucrania, y se les niega atención médica, incluso cuando sufren problemas de salud, como es el caso de Iryna Danilovich, periodista ucraniana de Crimea, detenida en abril de 2022.

  • 1 periodista desaparecido 

La periodista ucraniana Zhanna Kyselova se encuentra en paradero desconocido. La redactora jefe del periódico local Kakhovska Zorya, cerrado tras la invasión, fue detenida el 27 de junio de 2024 en su hogar en Kakhovka, ciudad de la región de Jersón, por las fuerzas de ocupación rusas. Moscú no ha proporcionado ninguna información sobre su paradero ni sobre su lugar de detención.

  • 23 ataques contra torres de televisión y radio

Las torres de televisión y radio se han convertido en blancos directos de los ataques rusos, como parte de una estrategia destinada a interrumpir la difusión de información independiente. Desde el 24 de febrero de 2022, RSF ha documentado 23 ataques contra torres de televisión, algunas de las cuales, como la de Jarkov, en el noreste del país, han sido alcanzadas en múltiples ocasiones. RSF ha denunciado estos ataques ante la Corte Penal Internacional (CPI) como crímenes de guerra.

  • 329 medios cerrados

Desde el inicio de la guerra, según el IMI, socio ucraniano de RSF, 329 medios ucranianos han cesado su actividad. Estos se han visto afectados por el colapso del mercado publicitario, la escasez de personal debido a la movilización o el exilio, así como por los bombardeos y la ocupación rusa. La reciente decisión de Donald Trump de suspender la ayuda internacional de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) ha agravado aún más la situación del sector, dado que la mayoría de los medios ucranianos dependen de este apoyo y requieren financiación f a largo plazo para seguir operando. Así lo revela el informe de RSF “De la resiliencia a la recuperación: asegurar el futuro de los medios ucranianos”.

Durante este tiempo, RSF ha brindado apoyo a los periodistas a través de su Centro para la  Libertad de Prensa en Kiev, la capital, y mediante ayudas  de asistencia para medios y profesionales. Desde el 24 de febrero de 2022, en colaboración con sus socios locales, entre ellos el mencionado  IMI, más de 1.900 reporteros y 270 medios han recibido apoyo de RSF.

Según la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2024 de RSF, Ucrania ocupa el puesto 61 y Rusia el 162, de los 180 países que conforman el análisis.