UCRANIA | Periodistas y centros de transmisión en el centro del conflicto
| Periodistas y centros de transmisión en el centro del conflicto
29.04.2014 17:56
Reporteros Sin Fronteras manifiesta su alarma por el crecimiento sistemático de los ataques a los profesionales de los medios de comunicación en el este de Ucrania.
El secuestro de periodistas empieza a convertirse en una práctica habitual en en Sloviansj, ciudad controlada por la «República del Pueblo de Donetsk». Reporteros Sin Fronteras pide a todas las partes implicadas que dejen de tratar a los informadores como objetivos que controlar o neutralizar.
Según la ONG ucraniana socia de Reporteros Sin Fronteras IMI, milicianos prorrusos detuvieron a 19 informadores en Sloviansk, el 1 de abril, de los que al menos dos siguen aún detenidos: el reportero de la televisión ucraniana ZIK, Yuri Leliavski, y el internauta Artem Deynega.
Leliavski lleva privado de libertad desde el 25 de abril y Deynega desde el 13, después de instalar una cámara en el balcón de su apartamento en Sloviansk.
Reporteros Sin Fronteras también manifiesta su preocupación por el periodista Serhiy Chapoval, de la web de noticias Volin’Post, del que no se sabe nada desde el 26 de abril. Según su hermana, realizó su última llamada desde Sloviansk.
El periodista de Novomedia, Ruslan Kukharchuk, ha informado que fue detenido mientras fotografiaba a una columna de milicianos, el 27 de abril, y pasó la noche en una comisaría de la ciudad, donde fue interrogado con una bolsa tapándole la cabeza y una pistola apuntada en la sien.
Mientras tanto, continúa sin haber noticias del periodista Sergei Lefter, detenido desde el 16 de abril cuando ejercía como observador de una una misión enviada por la ONG Open Dialogue Foundation.
«Estos secuestros, diseñados para crear una reserva de secuestrados e intimidar a otros periodistas, son intolerables. Ante nuestro ojos Sloviansk se está convirtiendo en un triángulo de las bermudas impredecible, donde la seguridad de los periodistas ya no está garantizada», denuncia RSF, que pide a todos los que pueden tener alguna influencia sobre las autroprocalmadas autoridades de la región que hagan todo lo posible para poner fin a estas acciones criminales.
La autorpoclamada administración de la ciudad de Sloviansk insiste en requerir acreditación los periodistas desde el 26 de abril, después de comprobar su identificación y trabajos anteriores. Según la agencia rusa RIA-Novosti, los solicitantes deben también presentar una carta de recomendación de otro periodista previamente acreditado, preferiblemente ruso.
Varios periodistas europeos y estadounidenses han visto rechazada su acreditación y otros muchos han informado que se les está pidiendo dicha acreditación en la actualidad para poder entrar a la ciudad.
El autoproclamado alcalde, Viacheslav Ponomarev, ha explicado, en declaraciones a RIA Novosti, que se ven forzados a tomar este tipo de medidas «porque muchos periodistas han estado transmitiendo de forma deliberada información falsa y si confirmar».
El periodista bielorruso Stepan Chirich, de la cadenza rusa NTV, ha sido puesto bajo arresto domiciliario, el 26 de abril, dos días después de ser detenido en Dnepropetrovsk por llevar gafas con grabadora de video incorporada. Chirich ha sido acusado bajo el artículo 359 del código penal de «usar una tecnología especial que permite recopilar información secreta». Reporteros Sin Fronteras pide que se lleve a cabo una investigación imparcial sobre este caso y considera desproporcionado el castigo por llevar una cámara oculta, si se demuestra que no está involucrado en ningún espionaje.
La organización también condena la explusión de muchos periodistas rusos, entre los que se incluyen Julia Shustraya y Mikhail Pudovkin, de la cadena rusa LifeNews, detenidos el 25 de abril en Donetsk y escoltados ese mismo día a la frontera rusa por los Servicios de Seguridad Ucranianos. A mediados de abril, Ucrania impuso severas restricciones a la entrada de hombres de nacionalidad rusa de 16 a 60 años.
En paralelo, simpatizantes del grupo «República del Pueblo de Donetk» irrumpieron en la sede de la televisión pública en Donetsk, el 27 de abril, y cambiaron la señal a la cadena rusa Rossya 24. Ayer, varios hombres armados tomaron el control del centro de transmisión de Donetsk y desconectaron la señal digital de las televisiones ucranianas y las señales analógicas de UT-1 y 5 Kanal.
También en Kiev, varios activistas atacaron la sede de Inter TV, rompiendo sus piertas y lanzando humo al interior del edificio. Solicitaron la desconexión de las series rusas de televisión y después se manifestaron frente a la sede de ICTV con la misma demanda. Finalmente, activistas prorrusos cortaron la señal de los canales ucranianos del centro de Kramatorks, el 18 de abril.
Reporteros Sin Fronteras rechaza la influencia que todas las partes del conflicto en Ucrania pretenden ejercer en las retransmisiones televisivas.