El periodista Francisco Romero Díaz fue asesinado ayer, jueves,16 de mayo, en el estado de Quintana Roo, a pesar de contar con las medidas de seguridad del Mecanismo para la protección de personas defensoras de derechos humanos y periodistas. Es el quinto periodista asesinado desde el inicio del año, lo que hace que en 2019 México sea el país más mortífero del mundo para la prensa.
Romero fue hallado muerto en la ciudad Playa del Carmen, en el estado de Quintana Roo (sudeste del país). Según información de Reporteros sin Fronteras, Francisco Romero Díaz recibió una llamada telefónica a las cinco de la mañana para que fuera a cubrir un suceso a un bar llamado “La Gota”. Una hora después encontraron su cuerpo a unos metros del bar. Según testigos, con golpes en el cuerpo y dos disparos en el rostro.
Francisco Romero Díaz era un periodista independiente especializado en la nota roja, colaborador del periódico Quintana Roo Hoy y fundador de la página Facebook de noticias locales “Ocurrió Aquí”. Recibía a menudo amenazas de muerte por su trabajo y, en agosto de 2018, tras el asesinato de dos de sus colegas –Rubén Pat y José Guadalupe Chan Dzib, que trabajaban para el medio de comunicación digital Semanario Playa News–, pidió ayuda al Mecanismo para la protección de personas defensoras de derechos humanos y periodistas, que le otorgó un “botón de pánico”, un vehículo y, unos meses después, una escolta conformada por cuatro policías que lo seguía cuando se desplazaba. El periodista no estaba acompañado por los escoltas cuando lo asesinaron, les había pediro a las diez de la noche que se retiraran a descansar. Rubén Pat también contaba con la protección de este mecanismo nacional cuando lo ejecutaron.
“Las autoridades de Quintana Roo deben identificar cuanto antes a los autores materiales e intelectuales de este terrible crimen y hacer que rindan cuentas ante la justicia”, afirma Emmanuel Colombié, director del Despacho América Latina de RSF. “Francisco Romero Díaz es el quinto periodista asesinado en México en lo que va del año. El Gobierno debe tomar decisiones valientes y reformar a fondo el mecanismo nacional de protección, cuya eficacia ha sido cuestionada constantemente”, añadió.
Este quinto asesinato registrado en 2019, que hace de México el país más mortífero del mundo para la prensa, fue precedido por los de: Telésforo Santiago Enríquez, Jesús Eugenio Ramos Rodríguez, Rafael Murúa Manríquez y Santiago Barroso.
México ocupa el puesto 144, de los 180 países que conforman la actual Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa elaborada anualmente por RSF.
Consulta más información sobre México en el Informe Anual elaborado por RSF-España.