RUSIA | El periodista ruso Ivan Safronov cumple dos años en prisión, acusado de «traición»
Reporteros Sin Fronteras solicita la liberación de Ivan Safronov, uno de los periodistas rusos más conocidos y respetados en el país, autor de las mayores exclusivas en medios de comunicación. El pasado 7 de julio cumplió dos años en prisión y está siendo víctima de una farsa judicial. Sus abogados se han convertido en objetivo de las agencias de inteligencia y se les impide defenderlo.
Fue Safronov quien, en marzo de 2019, reveló que Rusia estaba vendiendo aviones de combate Sukhoi Su-35 a Egipto, desencadenando un enfrentamiento diplomático entre Rusia y Estados Unidos. También fue el primer reportero en señalar la causa de un incendio a bordo del submarino nuclear secreto Losharik en el que murieron 14 marineros en julio de 2019.
A sus 32 años, Safronov se enfrenta a una posible condena de 20 años en prisión acusado de traición en un juicio que comenzó el 5 de marzo. «Calumniado como traidor a la nación, este periodista está siendo castigado por negarse a revelar sus fuentes», afirma Jeanne Cavelier, jefa del área de Europa del Este y Asia Central. «Las acusaciones que se han hecho son ridículas, no se ha aportado ninguna prueba y el derecho a la defensa está siendo incumplido. Este caso ilustra el control total del Ejecutivo sobre el sistema judicial que ha abandonado toda pretensión de legalidad. Esta persecución debe parar e Ivan Safronov debe ser puesto en libertad».
Safronov fue arrestado el 7 de julio de 2020 por el Servicio Federal de Seguridad (FSB) mientras iba camino a la oficina. Reputado especialista en el ámbito militar-industrial de Rusia, trabajaba como asesor de prensa del jefe de Roscosmos, agencia espacial rusa. Cuatro meses antes de su arresto, Safronov había dimitido del diario económico Vedomosti en protesta por la intromisión editorial del los nuevos dueños. Se había unido a este periódico tras una década trabajando para su competidor, Kommersant, del que fue despedido tras negarse a revelar las fuentes utilizadas en un artículo sobre el presidente del Senado, del que se rumorea que es cercano al presidente Vladimir Putin.
Sus fuentes son lo que más ha interesado a los investigadores. Seis días después de su arresto, le ofrecieron como trato una sentencia de no más de 10 años en prisión si confesaba el nombre de estos contactos y se declaraba culpable. Este acuerdo contradecía la afirmación del portavoz presidencial, Dmitri Peskov, de que la detención de Safronov no estaba relacionada con sus actividades periodísticas.
Safronov está acusado de proporcionar información clasificada a un amigo checo, trabajador de los servicios de inteligencia de la República Checa, y a un politólogo que, presuntamente, entregó esta información a la inteligencia alemana. En este último caso, Safronov habría recibido $248 como pago por el favor.
Los detalles del caso están clasificados, el juicio se celebra a puerta cerrada y sus abogados están sujetos cláusulas de confidencialidad. El tribunal, situado en el distrito moscovita de Lefortovo, tan solo otorgó dos semanas en enero y febrero de 2022 a los abogados de Safronov para familiarizarse con un caso de 10.000 páginas en el edificio del FSB, sin posibilidad de hacer fotos o tomar notas. De este enorme archivo se extrae que el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia (SVR) ha estado monitoreando las comunicaciones de Safronov y su ordenador personal durante años.
Las violaciones del derecho a la defensa han sido constantes durante el juicio. Durante una audiencia en junio, Safronov no pudo presentar peticiones al tribunal debido a que los documentos preparados por sus abogados fueron confiscados en prisión antes de que él pudiese leerlos. Asimismo, todas las solicitudes que ha presentado al tribunal han sido sistemáticamente negadas. Las limitaciones impuestas a sus abogados defensores incluyen la denegación del acceso a las actas de las audiencias y la prohibición de usar un ordenador portátil en la sala, derecho que, sin embargo, se concede a los fiscales.
Además, uno de sus abogados, Dmitri Talantov, ya no puede contribuir a su defensa porque fue detenid0 el 28 de junio bajo la acusación de «desacreditar al ejército ruso». Sus otros dos abogados defensores, Yevgeny Smirnov e Ivan Pavlov, fueron previamente forzados a huir del país después de que el FSB iniciase procedimientos judiciales contra ellos por su vinculación con el caso.
Además de estar en prisión provisional por encima de los 18 meses legalmente permitidos, a Safronov también se le ha impedido llamar y recibir visitas de su familia.
El coraje del periodista ha estado indudablemente inspirado por su padre, un reputado reportero de Kommersant especializado en temas de defensa. Ivan Safronov padre murió en una sospechosa caída desde la ventana de su apartamento en 2007 que las autoridades catalogaron como suicidio. A sus 51 años, había estado investigando la venta de armamento ruso a Oriente Medio.
Rusia ocupa el puesto 155 de 180 en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2022 de RSF.